He tenido una infancia feliz. Mi hermana, 7 años mayor que yo, cuando ella tenía unos 11 o 12 años, me solía recitar esta poesía: "La princesa está triste....¿qué tendrá la princesa? / Los suspiros se escapan de su boca de fresa,...". Recuerdo que, al principio, no me gustaba porque yo era muy alegre y me apenaba que aquella niña, que además era princesa, estuviera triste. Con los años me enteré que formaba parte de una composición poética titulada Sonatina de un gran escritor nicaragüense del Modernismo. Su nombre era Rubén Darío, aunque en realidad se llamaba Félix Rubén García Sarmiento. Una de sus obras más importantes se titula Azul, recopilatorio de cuentos, poemas en prosa y en verso. Azul, como las aguas que bañan las costas de su país de origen, Nicaragua, bañadas por el Océano Atlántico así como por el Pacífico. Es un país de grandes montes y volcanes así como de ríos y lagos. La bandera de este bellísimo país es blanca y azul, los mismos colores que componen la enseña de Argentina, territorio con maravillosos parajes entre los que destacan los Andes, columna vertebral de la América del Sur. En este país desempeñó cargos diplomáticos el poeta Rubén Dario, mencionado anteriormente, y país al que glosó en Canto a la Argentina. Tierras, ambas, de grandes gentes de buen corazón, solidarios, leales y merecedores sus habitantes de una vida plena de ventura y prosperidad.
Casa en la que vivió Rubén Darío durante su permanencia en la Isla Martín García y que hoy día forma parte del recorrido turístico de la misma.
4 comentarios:
Estupendo trabajo y un encantador relato. Gracias, Meli, por tu valiosísima aportación en este blog de ensueño.
Un abrazo.
Gracias Melip, Maravillosa forma de unir dos países de américa con documentación, y por sobre todo, con tu amor.
Un beso
Gracias, Amelia querida. Yo agrego que España vio nacer a la amada del gran panida, Francisca Sánchez.
Argentina, Colombia, Chile, Francia
y otros países forman parte de la constelación de países que Rubén amó. Máxime España, cuya lengua revolucionó y en donde tan buena aocgida tuvo.
Un abrazo agradecido, desde Managua, Nicaragua. Melba
Totalmente de acuerdo con Eduardo, con Diamantina y Componiendo...Sólo añado que muy bien escrito.
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